¡Si tan sólo tuviera ya un empleo! y bueno, a lo que realmente me refiero con el deseo de tener un empleo es al dinero que éste me brindaría. Así con lo materialistota que soy, iría a gastar lana cual obsesionada, con lo cual compensaría ese hueco generado por la soledad. Ya saben, así como soy yo iría a comprarme jeans carísimos, converse carísimos, t-shirts y todo aquello que me causa cómoda felicidad. Gastaría en una membresía al gimnasio tipo “Rocky” más cercano a mi casa, pues creo fielmente en que son los verdaderamente efectivos, así fue como Rocky le ganó a Drago y a no sé cuántos más, ¿no? Porque eso de ponerse maquillaje y portar “be-be” en el trasero para ir al gimnasio nomás no es lo mío.
Me iría diario a la matinée antisocial del cine, esa donde sólo te topas con viejitos o con escuincles incontrolables… obvio optaría por las funciones con los viejitos.
¡Pppfff! Ni siquiera tengo grandes planes sobre cómo gastar el dinero que no tengo y que me proporcionará felicidad infinita. Creo que no sirvo para ser una mujer Polanco o Lomas… ¡ni hablar! Deberé “conformarme” con seguir yendo a los conciertos multitudinarios, a darles su vuelta a los hippies de Coyoacán y a ver a la gente funky-retro-kitsch de la Condesa. Todo ello tan pronto y me haga de un nuevo empleo.
¡Perdón México por llegar a aumentar la tasa de desempleo!
Nótese el correcto uso de los signos de exclamación e interrogación, ¿por qué casi no los usamos?
3 comentarios:
Creo que en las relaciones y en el amor no hay éxito o fracaso, sólo son experiencias y ya; a los que te conocemos no nos gustaría que fueras un mujer Polanco o Lomas, te queremos tal y como eres, aunque te sea difícil ser tú.
Rap
Oye... que tú, que yo, que nosotros...
Atte.
Tu nuevo pretendiente.
warf warf! ggrrrrrrrrrr
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